domingo, 5 de junio de 2022

El Quijote y Afrodita (la de Mazinger Z)



Estoy empeñado en que los alumnos de bachillerato queden intrigados, como mínimo, por el Quijote. He probado estrategias de todo tipo y este año voy a por la más arriesgada, los guiñoles. Me salió muy mal con mi hija. Le contaba cuentos basados en aventuras del Quijote cuando era muy pequeña y se lo pasaba bien, aunque siempre me pedía que le repitiera las mismas y yo me aburría. Utilizaba a un toro de peluche y a una jirafa y los convertía en personajes de Cervantes. Llegó un momento, poco antes de ir al instituto, en que ella no quería ni oír hablar del Quijote. Cuando se lo mentaba, salía corriendo y gritaba "¡no, el Quijote, no!" Conseguí justo lo contrario de lo que pretendía. Yo también odiaba en mi adolescencia los gustos musicales de mi padre y a ella le pasó lo mismo con mis gustos literarios, quiero pensar. O eso o que convertir a un toro en Sancho Panza y a una jirafa en don Quijote no fue muy buena idea. Aprendiendo del error, como buen ser humano, he conseguido una reproducción metálica de Mazinger Z y un peluche de Doraemon, para modernizar a los personajes de don Miguel. Los diálogos me ha costado adaptarlos, sobre todo los de los galeotes, que, como podéis suponer, son miniaturas de los Pitufos. Ya os contaré, seguro que lo que más les va a impresionar va a ser el episodio en el que Dulcinea dice aquello de "¡Pechos fuera!". Aunque Afrodita nunca gritara eso, en el imaginario colectivo ya está instalado, como lo de "con la iglesia hemos topado". 

No hay comentarios:

Publicar un comentario