Cuando un avión rompe la barrera del sonido se observan unas
magníficas ondas de choque. Ante un espectáculo así uno no puede dejar de
penar: esto tiene que servir para algo más (lo mismo le pasó a Newton con la
manzana). Y en efecto, de esta idea surge otra gran idea, nada menos que la de
eliminar las dolorosísimas piedras en un riñón sin necesidad de recurrir a la
cirugía. Tengo la fantasía de que un piloto de caza se estaba tomando una copa,
como todos los viernes, con un amigo urólogo. Mientras el médico se lleva el
vaso a los labios, el militar presume describiendo su experiencia. Ha visto con
sus propios ojos cómo ciertos materiales se desintegraban sin que ningún otro
objeto los tocara siquiera. El whisky con hielo se detiene en un punto a medio
camino entre la mesa y sus labios: ¿Puedes repetirme eso? ¿Qué dices que has
hecho? ¿Qué dices que has visto? Naturalmente, la aeronáutica de guerra y la
formación de piedras en un riñón son dos disciplinas bien distantes y los
resultados de una no se pueden secuestrar directamente. Solo las ideas en bruto
tienen licencia para sobrevolar la frontera, lo que en ningún modo ocurre con
las conclusiones elaboradas. Por ello al médico no se le ocurrió atar a sus
pacientes al morro del avión de su amigo. Lo que hizo fue tomar la idea
prestada para iniciar con ella una investigación interdisciplinaria. Hoy la
litotricia extracorpórea por onda de choque es un tratamiento no invasivo que
ahorra riesgos, dolores e incomodidades. También es una prueba de la
trascendencia que puede llegar a tener el hábito de tomarse una copa con los
amigos de vez en cuando.
1. La realidad no tiene la culpa de los planes de estudios
que se acuerdan en escuelas y universidades.
2. Para cambiar de disciplina agítense las ideas, los métodos y
los lenguajes.
3. Disciplina: conjunto de ideas, métodos y lenguajes para
comprender un pedazo de realidad.
4. Nada hay más interdisciplinario que la propia realidad.
5. El pulpo mimético de Indonesia (Thaumoctopus mimicus) tiene
talento interdisciplinario, multidisciplinario, pluridisciplinario y
transdisciplinario, lo que le permite, si conviene, hacerse pasar por hasta 15
quince especies distintas.
6. Interdisciplinariedad: práctica en la que ciertos vicios son
virtudes: intrusismo, promiscuidad, dispersión…
7. ¿Qué hacer? Comprender (no tenemos nada mejor que hacer).
¿Comprender qué? Comprender la realidad (no tenemos nada más a mano).
8. Las disciplinas se pueden reproducir por simple contacto
físico.
9. Las aulas universitarias son disciplinarias, sus cafeterías
interdisciplinarias.
10. El límite de la hiperespecialización (saber todo de nada) es
tan grotesco como el de la hipergeneralización (saber nada de todo).
11. Comprender cómo se las arregla un pez para nadar requiere
nociones de zoología, etología, anatomía, fisiología, evolución, mecánica,
hidrostática, hidrodinámica, ingeniería…
12. El especialista ahorra energía a costa de aceptar un riesgo
mayor frente a la incertidumbre (el osito koala solo come eucaliptus).
13. El generalista despilfarra energía para enfrentarse a un
riesgo menor frente a la incertidumbre (la rata come cualquier cosa).
14. Solo existe un lugar en el que lo interdisciplinario pierde
todo interés: en un bosque con más árboles que ramas.
15. El conocimiento interdisciplinario avanza a golpe de
concentración y de dispersión.
16. Es tan difícil encontrar humor en un buen poema como no
encontrarlo en un buen aforismo.
17. La pureza es una mezcla de referencia.
18. El conocimiento avanza por las costuras de sus disciplinas.
19. El gran interés de la conversación interdisciplinaria se da
cuando sus interlocutores no ignoran lo mismo.
20. En 1865 Maxwell integra el magnetismo, la electricidad y la
óptica en una sola disciplina: el electromagnetismo; en 1905 Einstein integra
la mecánica, la termodinámica y el electromagnetismo; hoy esperamos unificar la
física cuántica y la gravitación… o la irrefrenable tenencia politeísta del
conocimiento científico.
21. Dedicarse a una sola disciplina es como hablar un único
idioma: empequeñece la realidad.
22. La mera existencia de la ética y la estética obliga a que
cualquier otra disciplina sea interdisciplinaria.